Winston la considera un símbolo de la libertad. Los miembros del Partido nunca cantan, pero al escucharla a través de la ventana de su cuarto rentado, Winston (y pronto, Julia) se sienten esperanzados acerca del futuro. ¿Qué es lo que esperan? Que los proles se den cuenta de lo crítico de su situación y se rebelen contra el Partido. Después de todo, razona Winston, los proles constituyen el único grupo capaz de derrotarlo, ya que conforma el 85% de la población de Oceanía. Lamentablemente, tanto Winston como Shmoop saben que los proles no son lo suficientemente listos como para actuar en conjunto. Será mejor pasar al plan B.

Pero eso no es todo. Winston y Julia también la ven como un símbolo de la fertilidad y, por lo tanto, de esperanza para el futuro. La consideran "hermosa" por sus fuertes brazos, sus amplias caderas y su dureza, indicativos todos de su habilidad para dar a luz a las futuras generaciones de rebeldes, cuyo objetivo no será otro que el de derrocar al Partido.