Cuando se habla mucho de ojos en una novela llamada El hombre invisible, ya sabes que algo ocurre con el tema de la visión. Y tienes razón.

El reverendo Barbee da un discurso ante una multitud alabando al fundador de la universidad. Más tarde se nos revela que Barbee es un hombre ciego. Además, el hermano Jack tiene un ojo de cristal. Esto demuestra la naturaleza errónea de sus visiones: Barbee da un gran discurso alabando a una institución y a un hombre que son básicamente una farsa, mientras que Jack propugna una ideología terriblemente fría:

Este es tu nuevo nombre. Procura recordar, desde ahora, que no tienes otro nombre que éste. Convéncete de ello hasta el punto de que si te despiertan llamándote por este nombre seas capaz de reaccionar cual si fuese el tuyo. Muy pronto serás conocido por este nombre en todo el país. Este y sólo éste es tu nombre, ¿comprendido? (14.133)

En cuanto al narrador, se cree invisible porque nadie logra verlo como realmente es, sino como a alguien de quien se pueden aprovechar:

Sabed que si soy invisible ello se debe, tan sólo, a que la gente se niega a verme. (Prólogo 1)

Al darse cuenta de esta invisibilidad social, el narrador decide asociarla a una invisibilidad real y desaparece por tiempo indeterminado.