Assef

Si Hassan representa la bondad y amabilidad, Assef encarna la maldad y la crueldad. Este personaje es un verdadero villano. Incluso si nos pusiéramos a pensar como locos, no estamos seguros de que hubiéramos encontrado alguna buena cualidad en él. Este es solo un ejemplo de sus comportamientos sociópatas:

Se inclinó hacia mí, como quien está a punto de compartir un gran secreto—. "Nadie puede conocer el significado de la palabra "liberación" hasta que se libera, hasta que se planta en una habitación llena de blancos [los hazara en Mazar-i-Sharif], y deja volar las balas, libre de sentimiento de culpa y de remordimiento, consciente de ser virtuoso, bueno y decente. Consciente de estar haciendo el trabajo de Dios. Resulta imponente. Besó las cuentas del rosario y ladeó la cabeza. (22.24)

Se puede decir que Assef es el típico sociópata de manual. ¿Dónde demonios está su conciencia? Bueno, lo cierto es que nunca la tuvo. En ningún momento se muestra arrepentido por la violación de Hassan, que se produce cuando Assef, Amir y Hassan son todavía unos niños. Puede que Assef simplemente no piense que los hazara sean iguales a los pastún. Quizá eso explique (aunque no justifique) sus sádicas y crueles acciones. Lo más probable es que el racismo simplemente forme parte del montón de crueldades de las que es partidario, entre las que se incluyen el abuso sexual a menores, la violación y el asesinato.

En el caso de Hassan, no tenemos muy claro por qué es tan bueno. Sin embargo, la fuente de maldad de la que se alimenta Assef es un absoluto misterio. Assef es como un terremoto o un tornado: la única opción es aceptar su fuerza destructiva. Lo extraño es que Amir a menudo se identifica con Assef, o con un verdugo talibán. Creemos que es lo que hace interesante a Amir: se encuentra entre Hassan y Assef, dos polos opuestos que parecen sentirse como en casa dentro de él. Puede que no sea coincidencia el hecho de que tenga que enfrentarse a Assef para salvar a Sohrab. Si Amir está dispuesto a redimirse, tiene que plantar cara a la parte más oscura y malvada de sí mismo.